Por Alison Guzman
20 de junio de 2019
Traducido por Ignacio Krell
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Hoy en día, de repente, todos están por la "causa indígena". Cuando comenzamos este trabajo con las comunidades mapuche en Chile hace 6 años, los problemas de los indígenas no estaban priorizados y, en cierta medida, eran invisibles en los medios de comunicación tradicionales. Producto de la campaña #NODAPL, en América del Norte solo recientemente se ha convertido en un tema candente, la #descolonizacion, junto a términos y hashtags que han ganado popularidad de redes sociales.
Edgar Villanueva, de la Nación Lumbee, llama la atención sobre el vínculo entre el mundo de la filantropía y el hecho de que los nativos americanos están recibiendo menos fondos. Su reciente libro, Decolonizing Wealth, "proporciona un análisis provocativo de las dinámicas coloniales disfuncionales en juego en la filantropía y las finanzas" y hace referencia a "Los Nuevos Colonialistas" que, según la Foreign Policy (Política Exterior), por nombrar algunos, serían Oxfam, Doctors Without Borders y Mercy Corps, por no mencionar la Fundación Bill y Melinda Gates.
Según Inside Philanthropy, los nativos americanos representan aproximadamente 5.4 millones de personas, lo que representa casi el 2 por ciento de la población de los EE. UU. Pero el apoyo filantrópico sigue siendo bajo, con menos del 0.5 por ciento de los dólares de subvenciones de la fundación anual en los Estados Unidos. A pesar de esto, según un informe del Instituto de Desarrollo de las Primeras Naciones en 2018, Inequidad Creciente: Grandes Fundaciones Donando a Organizaciones y Causas Nativas Americanas, los filántropos en los Estados Unidos están dando menos aún a las organizaciones nativas americanas, mientras que el número de causas y grupos ha aumentado. De 2006 a 2014, las donaciones anuales de grandes fundaciones disminuyeron en un 29%, o una reducción de $ 35 millones en fondos, que se otorgaron en su mayoría a organizaciones sin fines de lucro, no controladas por Pueblos Originarios, apoyando causas nativo americanas.
Lo mismo podría decirse de la situación en Chile, donde las industrias extractivas ironicamente tienen un rol filantrópico importante, pero donde el apoyo a las causas e inversiones en el desarrollo mapuche son inadecuadas y mínimas. Dicho esto, la mayoría de las iniciativas que provienen de las comunidades mapuche se basan casi en su totalidad en pequeños subsidios del gobierno para oportunidades de "espíritu emprendedor". Las comunidades indígenas en general en América del Sur, incluido Chile, son consideradas por los gobiernos como parte del problema, y no como la solución. Vamos a apoyar más emprendimientos (pequeñas empresas), dicen. Espera, ¿para cuántas comunidades? No importa, simplemente dividámoslo en pequeños subsidios.
MAPLE Chile
MAPLE Chile colabora con comunidades mapuche sólo por invitación. Hasta la fecha, hemos sido invitados por cuatro comunidades de los territorios costeros ancestrales del lago Budi, y estamos trabajando allí con grupos locales de comunicación mapuche, como la Escuela de Cine Mapuche y la Red de Radio Comunitaria Werken Kurruf. MAPLE también incorpora una amplia red de colaboradores chilenos y externos, entre ellos el Municipio de Teodoro Schmidt, CONAF, Centro Experimental de Agroforestería Huelemu (Chile), Fundación Kennedy (WWT Chile), Fundación Nucleo Nativo (Chile), y A2Delante (Canadá).
Pronto, a través de un Hub (o Laboratorio Experiencial) de MAPLE para Economías Indígenas del Buen Vivir (Kume Mongeleal) esperamos servir a las comunidades en el área de Budi y también nuevas redes cerca de la región de Villarrica, donde estamos sentando base. Con este fin, se están ensamblando múltiples socios locales y globales a través de un proceso de consentimiento plenamente participativo que involucra a nuestros asociados comunitarios y autoridades tradicionales mapuche, que son los guardadores de las tierras en las que operaremos.
Desde 2012, en MAPLE Microdesarrollo Chile hemos estado trabajando como un equipo de campo de inserción comunitaria, prestando servicios como conectores a nuestra misión con comunidades mapuche en el sur de Chile, que reúne apoyo para la creación holística de activos indígenas, es decir, tomando los puntos fuertes de una comunidad y creando formas para el crecimiento sostenible de los activos de la comunidad bajo administración de los mismos pueblos indígenas. Una tarea muy difícil de asumir, debo decir. Sin embargo, con orgullo y gracias a The Bay y Paul Foundations que ha creído sin cesar en nuestro trabajo, nos seguimos enfocamos en lo que las comunidades ya tienen, y no en aquello que no tienen. Entendemos que con lo que ellas ya tienen, las comunidades pueden comenzar a proporcionar estratégicamente un mejor futuro para sus familias y su región a través de la construcción de activos indígenas.
Desde 2017, MAPLE y las comunidades Budi se están uniendo en redes de agricultura orgánica (quinua) con la comunidad de Epucura, una de las comunidades vecinas de Villarrica. La visión de MAPLE Chile es fortalecer estos vínculos comunitarios en la región, mediante la difusión estratégica de herramientas y metodologías para construir la riqueza de las comunidades indígenas y sus activos tradicionales, para lo que también hemos iniciado diálogos con Corporación Newen, una ONG histórica liderada por practicantes mapuche. Los aliados internacionales y el apoyo van de la mano con esta visión. Actualmente, estamos en conversaciones con la Universidad de Oregón, el Instituto de Artes Indígenas Americanas y, a principios de marzo, con la Nación T'souke en Canadá (Isla de Vancouver, Columbia Británica), mientras nos preparamos para lanzar un Hub colaborativo con sede en Villarrica. Una bella ciudad de tamaño mediano en el corazón del país mapuche.
Nuestra transición al Hub nos permitirá crear redes de colaboración con más aliados y socios mapuches, y un enlace a los centros universitarios con sede en esta ciudad. Esto llevará a una mayor difusión y un mayor impacto de las herramientas para el empoderamiento económico y la descolonización. Ya hemos establecido una asociación con Fundación Kennedy, una ONG con personal en Villarrica que apoya un proyecto de conservación de humedales cercano a esta ciudad. La ecologista de ascendencia mapuche Lorena Ojeda visitó la comunidad de Llaguepulli para evaluar los indicadores de un programa conjunto para la restauración de humedales en la cuenca del Budi, a través de los viveros nativos de la comunidad desarrollados conjuntamente por MAPLE.
Filantropía MAPLE Chile
En el pasado, en nuestras expectativas de crecer, consolidar nuestros equipos y formalizarnos como una sucursal en Chile, nos hemos encontrado con barreras filantrópicas. Hoy día, nuestra misión sólo puede alcanzar un mayor impacto si hacemos la transición a un siguiente nivel de colaboración y recursos, para consolidar nuestro personal y abrir un espacio real para la creación de redes y conexiones con filántropos, universidades, Primeras Naciones en las Américas, e individuos como ustedes.
Un lindo desafío, por cierto. ¿Cómo nos presentamos como un grupo no nativo que respalda de manera auténtica las causas que consideramos relevantes para las comunidades nativas y el planeta? (Abordando el cambio climático, por supuesto). ¿Cómo formamos redes, como organización con estatus sin fines de lucro en Estados Unidos, con filántropos de América del Norte, por causas en América del Sur? ¿Cuál puede ser nuestro papel aquí en tierras ancestrales mapuche, después de 6 años como equipo de campo integrado en la construcción de activos mapuche?
Hay algunas señales alentadoras de que no estamos solos en estos esfuerzos. Hablemos sobre la construcción Nación a Nación (en el contexto de primeras naciones- pueblo originarios) de economías generativas.
Las iniciativas de la comunidad nativa en ambos hemisferios americanos son muy similares. Tomemos, por ejemplo, el Instituto de Permacultura de Árbol Floreciente de los Pueblos de Nuevo México, en el sudoeste de los Estados Unidos, y vinculamos esto a nuestro propio Grupo de Apoyo Mutuo co-diseñado aquí en la Patagonia Norte con la Comunidad Mapuche Llaguepulli, manteniendo formas de Vidas tradicionales para conectarse con alimentos sanos y vivos. O miremos hacia las comunidades indígenas de América del Norte que rechazan proyectos de energía no indígena, para trabajar en favor de la energía sostenible liderada por las propias comunidades en sus tierras.
Regresemos al 13 de marzo de 2019, cuando fuimos a recoger al aeropuerto aquí en la Región de la Araucania, al Jefe Gordon Planes, su hijo Ryan Planes y Andrés Ibañes de A2Delante, con sede en Canadá (un equipo que también trabaja como asesores externos para comunidades nativas, tanto en Chile como en Canadá, con sede en Montreal). El jefe Gordon proviene de la Nación T´souke, de los Salish de Estrecho, con unos 260 miembros registrados de la isla de Vancouver, Columbia Británica, Canadá. Si estás en el noroeste del Pacífico (¡hola mis colegas oregonianos!), ellos reciben visitas de todo el mundo para ver sus proyectos liderados por la comunidad.
Él voló desde un lado del continente al otro para encontrarse con las Primeras Naciones del Pacífico Sur: el Pueblo Mapuche-Lafkenche del territorio ancestral Lago Budi o Ayllarewe Budi. De hecho, uno de nuestros primeros intercambios tuvo que ver con eso: ¿quién puede decir que sus ancestros, de cualquiera de las regiones del Pacífico, no viajaron millas en sus canoas para intercambiar y compartir conocimientos entre sí? Después de todo, las culturas indígenas vinculadas a las canoas, la pesca y las travesías marítimas viajaron de manera expansiva por todo su territorio explorando la flora y la fauna, para sustentarse, y para saciar su sed por lo desconocido. No sorprende, por ejemplo, que las culturas polinesias terminaron en el sur de Chile hace miles y miles de años. ¿Quién dice que esto no es cierto para los Pueblos Salish costeros? Los científicos, los genealogistas y los arqueólogos aún se están poniendo al día con la posibilidad de que el intercambio marítimo sea en realidad mucho más amplio de lo que se creía con las evidencias disponibles. Deberemos esperar pacientemente las actualizaciones para confirmar lo que las Primeras Naciones ya se conocían entre sí.
La Nación T´Sou-ke es famosa por los proyectos de desarrollo administrados por la comunidad. Gracias al Jefe Gordon, quien ha sido jefe de la Primera Nación T'Sou-ke desde 2007, su comunidad se ha embarcado en un proceso de 100 años para construir una nueva visión comunitaria que se centre en la autonomía, la seguridad alimentaria, el renacimiento cultural y el desarrollo económico. .
Bajo su liderazgo, la Primera Nación T'Sou-ke se ha convertido en un líder en energía renovable y verde, al lanzar un proyecto modelo de micro-red solar. La comunidad ha generado electricidad a través del proyecto durante más de una década y ha atraído la atención internacional para la iniciativa. Puedes encontrar más información en su sitio web Tsoukenation.com , donde descubrirás Primeras Naciones que están organizadas y tienen sus prioridades claras como comunidad. De hecho, la creación de riqueza para su propia comunidad, en todo lo que esto abarca, ya sea pesca o energía, es lo que construye la cultura y la resistencia de la comunidad.
Salto a 2019, ahora tienen invernaderos extensos no sólo para cultivar sus propios alimentos, sino también para ingresar a los mercados internacionales de cultivo natural de ostras, camarones, almejas y salmón. Todo esto porque su filosofía es tener un impacto mínimo en la Madre Tierra, coexistir con Ella y asegurar un futuro para las próximas generaciones. Sin mencionar que su entorno sigue intacto y abundante.
Me gustaría citar un discurso del jefe Gordon Planes durante una reunión que tuvimos con él y las familias de la comunidad mapuche de Malalwe-Chanko:
"Tal vez un día podría suceder: traer a nuestra juventud aquí, a reunirnos con la Juventud Mapuche, que enviará esa luz positiva al mundo sobre cómo ha vivido nuestra gente desde tiempos inmemoriales: con una huella leve en la Madre Tierra. Las palabras que transmito en casa son las que digo ahora. Y las palabras que también diré a los gobiernos: que hay un buen trabajo (en conjunto) que hacer en el futuro. Y esto lo supimos durante mucho tiempo.”
"La responsabilidad se transmite a nuestros hijos bajo la guía de nuestros mayores para mantener vivo el viaje. Creo que hay mucho trabajo que podemos hacer juntos, y creo que lo haremos porque lo que personalmente pienso es que el mundo tiene para cambiar, y se están acercando a los pueblos indígenas para que los aconsejamos sobre cómo vivir de una manera adecuada. Así que creo que esto es sólo el comienzo. Y no creo que tengamos una palabra en nuestra cultura que se refiere al concepto de “nunca vernos de nuevo”. Nuestros mayores me dijeron una vez, que los pueblos indígenas saben cómo comunicarse entre sí y no importa lo lejos que se encuentren. Y hemos estado haciendo esto durante mucho tiempo. Veo la oportunidad de que esto pueda avanzar ahora.”
¿Ven? Yo no podría haberlo dicho mejor.
Menciona el hecho de que los pueblos indígenas pueden trabajar juntos. La importancia de vincular a los jóvenes nativos entre sí. Dijo que muchos se están acercando a las comunidades indígenas para pedirles consejo (por supuesto, ¡el estado de nuestro Planeta Tierra es muy preocupante!). Y dijo que la comunicación entre los pueblos es importante, sin importar la distancia. Construcción de primera nación a primera nación.
Entonces, ¿dónde estamos nosotros en todo esto? Somos los conectores. Organizaciones como A2Delante y MAPLE Microdevelopment Chile pueden ser naves conectoras entre las Primeras Naciones. Las comunidades se necesitan mutuamente para reconstruirse. Y para lo que vale el término "comunidades" un mundo cada vez más globalizado, me refiero a las comunidades tradicionales que han vivido en sus tierras durante miles y miles de años. ¡Y Todavía están allí! Y los jóvenes de hoy están más activos que nunca.
Los nativos americanos en Filantropía están trabajando para brindar más apoyo y servicios filantrópicos mejor informados a los nativos. Según su artículo When Eagles Hatch: nativos americanos en filantropía y activismo juvenil nativo publicado el 19 de marzo de 2019, están trabajando para construir: "una red de organizaciones sin fines de lucro, comunidades tribales, fundaciones y líderes de comunidades nativas y no nativas comprometidas, para involucrar, aprender y compartir recursos y mejores prácticas basadas en valores y tradiciones nativas.”
Cada comunidad, como una cama de flores dentro de un jardín, está impulsando sus ideas de riqueza comunitaria en coexistencia con la Tierra, al mismo tiempo que se hace frente al Cambio Climático. Debido al conocimiento y la sabiduría transmitidos por cientos de generaciones, estas contienen valiosos aportes para nuestras sociedades occidentales. Podemos trabajar con ellos por la transición de sus comunidades hasta convertirse en los nuevos centros de riqueza comunitaria del futuro, donde convivimos con ellos en un contexto postcolonial.
Como lo expresa Marjorie Kelly, vicepresidenta ejecutiva y miembro principal de The Democracy Collaborative, lo que realmente necesitamos es ser dueños de nuestro futuro a través de las economías generativas . Estamos de acuerdo con el sentido de su trabajo a través de The Learning / Action Lab para Community Wealth Building, un proyecto de cinco años que trabaja con organizaciones nativas americanas para crear riqueza en las comunidades indígenas, como conectores.
Estamos ansiosos por profundizar en una nueva etapa como aliados y simpatizantes externos. Al igual Marjorie Kelly su visión de crear economías generadas por la comunidad, o Katherine Gibson (a la que tuvimos el placer de conocer en 2018), una geógrafa económica feminista y cofundadora de la Red de Investigación de Economías Comunitarias (CERN) y de las Economías Comunitarias. Colectivo (CEC), a MAPLE Microdevelopment Chile, como colaboradores externos de comunidades indígenas, podemos ser conectores y filántropos para comunidades que buscan su camino hacia la resiliencia ambiental, la descolonización económica y la auto-sostenibilidad. Hay tanto que podemos construir juntos, creando y potenciando espacios institucionales de colaboración, para compartir aprendizajes inter-indígenas, co-diseñar métodos, iniciar el apoyo global de comunidad a comunidad y, lo más importante, avivar la esperanza.
Este llamado tiene dos direcciones: trabajar y aprender de las comunidades tradicionales basadas en la tierra y sus formas de coexistir con la naturaleza; y al mismo tiempo, aprovechar la oportunidad para crear un faro para la esperanza, de que es posible vivir en un mundo donde las sociedades tradicionales pueden enfrentar los desafíos de la globalización, la contaminación y la deforestación, difundiendo sus mejores prácticas y conocimientos, y sobreviviendo como Comunidades saludables. La coexistencia con nuestro planeta es la resiliencia.
¿Idealista dices? No. La esperanza hoy es una cuestión práctica. Mira a tu alrededor. ¿Estás en un mundo de soluciones? Si no cambiamos el estado de las cosas, estamos torpemente guiando a nuestras sociedades y generaciones futuras a un abismo insostenible. Y, sin embargo, creo que se está produciendo un cambio y que se está produciendo una transición, porque creemos en las comunidades de las Primeras Naciones y en sus líderes visionarios.
Quizás un paso en la construcción inter-nacional es compartir las experiencias con los demás. Experiencias de las que pueden aprender mutuamente y compartir resultados. A través del aprendizaje mutuo y el establecimiento de lazos de colaboración, como lo ha hecho la Nación Tsouke con la Nación Mapuche-Lafkenche, donde los jóvenes pueden viajar a las comunidades de los demás y participar y aprender allí sobre qué significa re-construir una nación y preparar a una comunidad para el futuro. Vemos que esto sucede en las Américas: jóvenes Pueblo en tierras Mapuche, jóvenes Mapuche en tierras Salish, organizaciones nativas que hablan directamente con personas Mapuche ... Colaboradores y aliados como MAPLE pueden representar una valiosa conexión para que las Naciones trabajen juntas.
La visión
Los co-directores del programa MAPLE Chile, Alison e Ignacio, ya se encuentran en el proceso de mudarse a Villarrica, ciudad pequeña ubicada en el corazón del país Mapuche, a 90 km de Budi y 80 km de Temuco. Villarrica (aproximadamente 50,000 habitantes según el censo de 2012), la última área conquistada por los españoles durante la colonización, es un destino turístico, una ciudad universitaria, rodeada por el Parque Nacional Villarrica y numerosas comunidades mapuche, y con varias organizaciones sin fines de lucro dedicadas a la conservación, comercio justo, más un sector turístico fuerte, cada vez más permeado por las ideas de la sostenibilidad del triple resultado y la participación de numerosas comunidades mapuche que alguna vez estuvieron excluidas por completo del turismo en esta área montañosa. MAPLE Chile llenará un nicho específico en el ecosistema institucional emergente de Villarrica, entre la investigación académica, algunos programas de desarrollo local administrados por iglesias y gobiernos locales, y el ambientalismo, proporcionando un enfoque único para el autodesarrollo indígena, conexiones de centro dinámico al Lago Budi con su fortaleza de la cultura y el lenguaje mapuche, y una trayectoria de 5 años como equipo de campo integrado, que actualmente prepara publicaciones en formatos escritos y audiovisuales para entregar nuestros kits de herramientas y procesos para la replicación y el aprendizaje mutuo adaptativo (que se lanzarán próximamente en un seminario que estamos organizando para finales de este año). Esperamos que dentro de dos años, el Hub iniciado MAPLE Chile y nuestros asociados se convierta en una institución ancla para los diálogos sobre la descolonización económica indígena y para la instalación de capacidades de autogestión en los territorios donde trabajamos a través de: evaluar y potenciar los resultados a largo plazo, extensión de pares a través del aprendizaje mutuo, talleres tipo retiro, seminarios, pasantías, colaboración académica y tecnológica, inversión social, comercio justo e incubación de empresas culturales.
Como invitación a considerar el potencial completo de la interconexión indígena, también queremos compartir con ustedes un video sobre este encuentro co-facilitado por A2Delante y MAPLE Chile a principios de este año 2019. Video: Standing with Each Other
¿Serás parte de esto?
Para obtener más información sobre el trabajo de MAPLE con comunidades mapuche, visita nuestro sitio web en http://www.maplemicrodevelopment.org/maple-chile. ¡También estamos interesados en escuchar directamente de ti!